Complete los espacios en blanco con el presente del indicativo de los verbos ser o estar.

Algunos de los sujetos están en corchetes.

En el siguiente ejemplo los verbos ser y estar están en negrita.

Ejemplo: Juan Alberto es de México pero está en California.

Los Ángeles, 28 de noviembre de 2019

Querido Felipe:

¡Saludos desde el sur de California! ¿Cómo

tú y Maribel? Ahora vivo en Los Ángeles y ahora [yo]  en Westwood, un barrio que al oeste del centro de la ciudad. Me mudé en junio y gracias a Dios, [yo]  contento y emocionado.

Vivo en un lindo apartamento de dos recámaras que tiene secadora, lavadora, un balcón y dos estacionamientos. La cocina

bastante grande. En el balcón mi barbacoa (BBQ grill). Mi apartamento muy cerca de todo: restaurantes, gimnasio, tienditas, paradas de autobús y una taquería. El dueño de mi edificio de apartamentos de Grecia, pero ahora estadounidense. El señor muy amable siempre con todos los inquilinos.

Mis estudiantes en mi nueva universidad

simpáticos. Por supuesto, también listos aunque no siempre listos para mis exámenes. Algunos no hablan mucho y a veces no vienen a clases; ¿posiblemente [ellos]  aburridos porque la clase demasiado fácil? Tengo una gran variedad de estudiantes: algunos del norte del estado, pero muchos de esta zona. Sospecho que por lo general [ellos]  más bien liberales.  Creo que la población estudiantil cristiana en su mayoría. También tengo dos estudiantes internacionales: Jean Pierre francés y Yuki japonesa.

En cuanto al tiempo, ahora hace sol y bastante fresco, nada como el frío de Toronto. Hoy, sin embargo,

un poco nublado, pero seguro más tarde sale el sol. No tenía mucha ropa para el calor, así que tuve que ir de compras. ¡Las camisas que de buen algodón están muy caras!

Debo terminar esta carta porque mi amiga Verónica y yo vamos a cenar juntos. Verónica

profesora de sicología. Ella y yo organizando una conferencia el próximo año. Puse un rosbif en el horno a las 4pm, así que seguramente ya hecho. La cena en su casa esta noche.

Escríbeme y cuéntame cómo

tú, tus hijas y tu perro.

Abrazos,

Juan Alberto